Dama blanca.
Joven niña,
adolescente,
conjunto de tentaciones.
Sangre hirviente,
cuerpo de mujer
encendiendo pasiones.
Estrella de mi firmamento
eternamente adorada,
pese a mi lamento
como princesa de cuento
te sentiste adulada.
Disfrutaron tus encantos
labios que no te quisieron,
te cubrieron de presentes
ante tus pies postrados
como esclavos dementes.
Conociste el paraíso
pero fue tu maldición,
confundida encontraste
la que fue tu perdición.
Una dama blanca
se cruzo en tu camino
llevándote al infierno,
bloqueando tu voluntad
acotando tú destino.
Polvo mortal en las venas,
era tu tétrica heroína
y aunque dormía tus penas,
destrozaba tu vida
apretando tus cadenas.
Pronto llegó el adiós.
Antes de la primavera
se paro tu corazón,
con la mirada partida
en un frío callejón.
20
No hay comentarios:
Publicar un comentario