Estrella.
Dulce
estrella,
hermosa
brillas
en
mi universo.
Tornas
mis penas
en
alegrías,
guiando
mi espíritu
en
la fantasía
de
mis pensamientos.
Centinela
de mi alma
bogas
ligera
en
el mar de mi vida.
Tu
nombre
me
atrapa
cada
vez que mi mente
lo
recuerda,
y
en los versos
de
este poema
lo
encierro.
¿Cuánto
amor
reclama
mi esperanza,
necesario
para
olvidar
la oscuridad
que
me atrapa?
En
tus ojos
reflejo
mi cariño,
obsesionado
por tus labios,
por
recorrer tu piel
lentamente.
Repito
con insistencia,
te
quiero,
eres
mi vida,
susurrando,
gritando,
en
un éxtasis divino.
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